sábado, 15 de febrero de 2014

Me Hubiera Gustado (1)

Hoy me hubiera gustado que me gustaras
más que por tu voz alejada o tus labios pintados.

Bien me hubiera gustado conocerte más,
más que en tu sonrisa recelosa o tu ropa cara.

Ya me hubiera gustado conocer
más de tu tez aceitunada o de tus largos cabellos.

Es que me hubiera gustado conocer
más que tu mirada desatenta, tu destino en la ciudad.

Sólo me hubiera gustado más
conocer tu nombre y conocer dónde bajas.

Y me hubiera gustado que te gustara yo,
saber adónde viajas y si te gustó mi poesía durante el camino.

lunes, 10 de febrero de 2014

Del Regalo Adecuado

Se sabe poco de dar sin dudar
en un mundo donde al vivir
apenas se aprende a recibir.

Recibirlo no se agradece tanto
así como otorgarlo se vuelve espanto,
y no se vale pensar antes de comprar.

Porque al parecer tiene todo precio,
la venta de ilusiones con olor
se vuelve a los días sólo dolor.

No queda siquiera su sinceridad
ni etiquetas para la mala amistad,
debe ser mentira todo el aprecio.

Debe ser música mal pagada,
o palabras tan sólo prostituidas
que a poco son memorias suicidas.

Yo regalé a quien no me ha amado
el mejor presente inadecuado,
un alma con tinta bien rimada.

A cambio recibí una sonrisa,
de las que afloran y marchitan
cual acuarelas que ya despintan.

La emoción duró aún menos,
porque en esos versos plenos
se fue mi amor cual polvo de tiza.

jueves, 6 de febrero de 2014

Tus Besos Definen

Difieren siempre tu boca con tus besos
porque crees que me daña tu incertidumbre,
cuando en realidad ya es una costumbre
preguntarnos ¿cómo terminar este amor ilesos?

domingo, 2 de febrero de 2014

Yo Así Te Detesto Mejor

Eres una persona horrible,
tu falta de humanidad
apenas deja que portes nombre,
pero debe ser una maldición
o el jodido azar de tu capricho,
lo que me hace mejor hombre
cuando me das tu cariño
o cuando insinúas tu atención en mí.

Importa un carajo cuanto me aleje,
importa menos si eres tú la que se va...
Yo así te detesto mejor.

¿Ya qué vergüenza podrías sentir?
Me has negado un feliz final,
te has robado mi obra y mi ser...

Perseguirte no sanará mi dolor
y a olvidarte, con los años,
dime ¿quién ha aprendido?...

¿Cómo despediste de fácil tus ojos
sabiendo que nos faltaron abrazos,
los últimos besos sinceros
y ese par de apasionados veranos?

Debe ser mejor para ti así,
aquel iluso de pocas palabras,
de promesas de jueves por la noche
y con sentimientos sin intento ni sustento.

¿Quién se habrá interpuesto
o qué te hizo tan dura conmigo?
de saberlo ¿qué cambiaría lo nuestro?