domingo, 31 de agosto de 2014

Brotes

Semillas de un valor fraguado
sobre marchas distintas todos
al son de igualado amanecer,
gritos da uno y el resto en el polvo.

Con moneda pública, trajes
usan los que incitan al paso,
los pobres descalzos se bastan
para caer en tan vacíos tratos.

Gentes esperanzadas en creer
ya regalan en tinta un poder
que ajeno de sí, darán al papel.

Hay corrupción en esas urnas,
con brotes a mentira algunas
y con compromiso real ni una.

lunes, 25 de agosto de 2014

En Fa Sostenido O Si Bemol

Al inicio de nuestra escena
aparecen tus pasos en fa sostenido
divididos en desvelos color mármol...

Para que lo sepas,
sé que no soy perfecto aunque antes lo haya dicho,
es que ni yo sé descifrar el intento de persona que soy,
a lo mejor un error de coordenadas cartesianas
a lo mejor el error más sencillo de tu descuido.

Y me conozco y te conozco,
pero sobre todo porque te conozco lo reconozco,
que no debería exponerte a mi palabrería
ni con el roce de mis pupilas
ni con el gozo de mis heridas.

Pretenderte como quise no logré,
no fallé pero tampoco al destino le gané,
y mientras escondo al imbécil del retrato
que permanece con mi rostro en tu lejano trato,
mejor vamos por otro vino y más llanto.

A estas alturas, ¿qué puedo ofrecerte
que antes no hayas de poder merecerte?
Si de tu devoción nunca he sido el santo.

Acorde o discorde a tu compañía
que mejor acierto para tu rutina
que tus manos con las mías.

¡Qué pesada es la labor de amarte a la medida!
no poder ser el excedente de tu corazón
ni tela de vela de tu náufraga embarcación,
¡cómo duele vivir cantando a tu partida
con la insistencia perforada de agonía!

Pero como si antes fuese tan distinto
el marco de este óleo musical,
nos limitaremos a lo de siempre,
para ti un viaje a Francia, para mí una italiana,
que para mentirnos sobran ficciones al mejor postor.

Una forma conocí
para vernos sin tenernos,
tú me ahorcas con versos y despechos
y yo te desnudo susurros sin derecho,
entonces adornas de mi boca el sueño de tus cabellos.

...Acabado este acto
el pesado sueño se te ha ido
y te queda un poema en si bemol.

Eres Capricho

Roseta superpuesta al incendio estrellado
que refleja la noche de otro coma sin sol,
mi receta traslapada de suaves intentos
y mal poblada en la cama de locos venenos,
una calma devaluada que con hilos del futuro
se disuelve al agua de agolpadas palabras,
esa dicha indispuesta y tergiversada
de una realidad a media verdad,
mas tú, la bella flor con pétalos de dulce licor
envuelta en capricho porque lo prefieres así.

Y tú, capricho ausente que se arropa
en la fragua de mis anímicas memorias,
esta tregua de añicos devueltos al sueño
sin resistencia alguna al viento impostor,
iluminada sombra de veces asomadas
donde cabe todo y te queda mejor la nada,
revólver que invierte su plomo en placer
de fiesta y verbena para mi fiebre,
pues yo, sí, yo, soy un capricho
reptando tu puerta como desvalido.

Entonces yo, capricho de tus lujurias
que por estéticas calientan mis letras,
al cambio de estación tuve la sensibilidad
que necesitamos al cabo entre los dos,
inquieto de bravía danza nostálgica
perseveré en lo que existió entre caricias,
porque en absoluto me enamoré
aún cuando cogiste mano ajena,
que, malagradeciendo, el desencanto te abordó
para entonces en más besos jamás entonados.

domingo, 24 de agosto de 2014

Sin Título

Si tu amor fuera verdadero, quizá fuera suficiente,
mas por no ser suficiente tu amor verdadero,
¿cómo condicionarlo, yo, que te hago mi deseo?
si es de tu deseo gozar con todo condicionarlo.

Sin Título

Hay pobreza entre mis manos
y bien quiero que lo sepas,
que me queda tu acento mal imitado
vibrando en este cuarto,
como el aroma a tu ropa de noche
anunciándome tu más grave falta.

¿Qué deleite te apacigua la calma
de no encontrarme al final de tu almohada
o qué madrugada se te antoja en la espalda
para obligarte al orgullo marchitado?
Deben ser la luna y el viento en tu cara
quienes atan tus caricias ciegas.

Bendito el bien que vele por ti
cuando me sobran las dudas
sin embargo, que te quede claro,
que recitar tu nombre sigue siendo sagrado
aún en la boca miserable que esculpen mis labios
y aún en Lourdes que recoge mi llanto.

Atenciones

Al ella hablarme
puede que no encuentre tierra firme
en la inmensa gravedad que compartimos,
tanto así que al dirigirse a mí
se me acorta la vida,
no porque no la quiero sino porque la desatiendo,
ese movimiento en sus labios ante mis ojos
es todo lo que enfoca mi vista y mi arte,
en esa forma de transformar sonidos
estoy perdiendo cuanto soy
y todo aquello cuanto dejo de ser
por intentar abordar su alma
con solo escucharla
sin poder tenerla, entenderla o merecerla.

Sin Título

Mujer perfecta no es aquella con ausencia de defectos,
sino la que impone presencia en sus virtudes.

Sin Título

Puede que este taciturno corazón
no merezca llenar su peor vacío contigo,
sin embargo
no esperaría menos de ti
que negándote tanto,
ya me has puesto más atención de lo debido.