Juzgando a tu ausencia
Me cansa esta paciencia,
Pues la única ciencia
Que rige mi conciencia
Es la voz sin clemencia
Que hace eco de prepotencia,
Sin más violencia
Que la de tu vivencia
En la mía sin lugar a penitencia.
Habítame en lo que silencia,
Pero hazlo con influencia
Para que duela menos mi carencia
De tus manos, de tu querencia;
Libérame esta demencia
Que llegó por ocurrencia
De tu partida entre dolencia,
Para valer con inocencia
Más que el que habita tu existencia.
Podrá nublarse el sol eternamente;
ResponderEliminarPodrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor. GAB
Al próximo poema mejor me lo respondes con un poema tuyo, ya sabes que me envicia lo que haces tú, Sole. TE ADORO
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