Con cada paso que te precede
hay una decisión detrás
a la cual debiste obedecer
por criterio propio o ajeno.
El costo que su razón cede
te define como persona más
si has sabido bien conocer
la causa como miel o veneno.
No puede haber ambigüedad
que abarque la consecuencia
porque tampoco hay entendimiento
al equilibrio tras una elección.
Tras toda esa humana capacidad
de quedarse con una sola esencia
lo que mejor vemos es padecimiento
luego de irnos por una opción.
¡Cuánta estupidez en lo que se goza existe
si luego te sientes mal por lo que no hiciste!
hay una decisión detrás
a la cual debiste obedecer
por criterio propio o ajeno.
El costo que su razón cede
te define como persona más
si has sabido bien conocer
la causa como miel o veneno.
No puede haber ambigüedad
que abarque la consecuencia
porque tampoco hay entendimiento
al equilibrio tras una elección.
Tras toda esa humana capacidad
de quedarse con una sola esencia
lo que mejor vemos es padecimiento
luego de irnos por una opción.
¡Cuánta estupidez en lo que se goza existe
si luego te sientes mal por lo que no hiciste!
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