Introducción

El poeta que bebe café sabe bien
que el único mejor aroma
entre la tinta y la taza
es el perfume de su amante.

-Rodrigo Villalobos F.

lunes, 9 de mayo de 2016

Stand By...

Tengo un domingo libre
en uno de mis bolsillos;
guardado en mi billetera,
se conserva intacto un café
para intercalarse con tus palabras;
hasta, hay un par de noches
colgadas en mi ropero
aún sin uso alguno.

Llevo añejas unas sábanas
que el estreno de tu calor corporal esperan;
conservo unos versos vírgenes
imperdibles para una mañana de lluvia;
incluso, me queda un bouquet
de coloridos aromas aterciopelados,
que espera tu voz para empezarse a secar.

¿Para cuándo el día, la hora y el lugar?

domingo, 1 de mayo de 2016

Flor De Papel

No se compara la biología de tus caderas
al cuerpo terso de ningún pétalo
que de par en par se abre en el ahogo de abril,
pues mejor se abren tus piernas febriles
al borde de mis carnales y desenfocados deseos.

Todo fruto que mana de tu boca perfumada
absorbe mi atención sincrónica bien herida
y de tu ramas que extremidades conforman,
brotan suaves hojas que acarician y perforan mi espalda.

Las elaboradas frases que cincelo para tu corteza de miel
parecen hacer efecto fresco en los níveos tallos
que hacen contorno a tu vientre y a tus muslos.

De a poco en poco llega la lluvia de mayo
y entonces mi influencia ya desvanecida
se hace tuya como las llamas que te comparto
dejando muerto tu ramaje que parecía duro.

Ya tus flores de papel blanco
enfermas de un orgasmo sin vector
te hacen desbordada, intrépida y animal
porque se baten en tinta tus bellos encajes.

Esas tus raíces móviles someten mi piel
mas no mis instintos
y no hay viento que te levante del suelo
si tú no se lo permites a cambio de placer.

Van durmiéndose tus oscuros ojos de avellana
en cáscaras de café quemadas,
van los tatuajes de tu polen desperdigado
como soplo helado llenando mi cama.