Admito mi necesidad,
Casi no lo reconozco,
No recuerdo mi última amada,
Más no puedo distinguir,
Todo me parece una calma
Y a la vez inocente lentitud.
Mi problema tiene nombre,
Pero cambia tanto a veces
Que olvido su motivo,
Carece en mí ya el sueño,
Me retuerce una nueva sed
En cada vaho de un amanecer.
Necesito mucho de este daño
Por más fe que ponga en contra,
Necesito enamorar de nuevo
A franca permuta sin tiempo,
Sincero fuego y condimento
Que demore o borre mi deseo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario